El mes de septiembre es un mes clave para preparar el huerto para el otoño. Ha acabado un ciclo, una estación calurosa y poco frecuentada por las lluvias y toca recoger los últimos frutos y empezar algunas tareas clave para comenzar la nueva estación con nuestro huerto en perfectas condiciones. Estas son las tareas para el mes de septiembre:
- Toca recoger los cultivos que ya han cerrado su producción como las judías o los melones.
- Recoge los últimos frutos: calabacines, pepinos o tomates.
- Realiza los primeros transplantes a los cultivos de invierno: brócoli, puerros, espinacas o guisantes.
- Elimina los restos de la cosecha y limpia bien la tierra de aquellas plantas que ya se han secado.
- Aprovecha las parcelas o los espacios que han quedado libres, plantando algunas especies leguminosas como las habas.
- Cambia el sistema de riego automático, en caso de tenerlo, para ajustarlo a la nueva época con más lluvias. Evitarás que se encharque el terreno.
- Realiza la poda de algunas ramas o plantas que hayan crecido demasiado durante el verano para asegurarte que el exceso de humedad del otoño, no de lugar a plaga de hongos e insectos.
- Si va a llover mucho, protege las plantas más delicadas bajo plásticos.
- Es buena época para la siembra de espinacas, guisantes, habas, acelgas, coles, escarolas, lechugas…
- Es momento para el transplante de plantas hacia una zona del terreno donde el frío no sea tan agresivo para evitar que se quemen las plantas de cebollas o lechugas.
- Es buen momento para cosechar tomates, pepinos, berenjenas, cebollas o patatas. Estas últimas, suelen aguantar bien hasta septiembre o algo más, en las zonas frías de huertos.