La fruta ofrece mucho más que el placer gastronómico, ofrece el placer de preparar un bizcocho con las manzanas que nosotros mismos hemos recogido, bienestar espiritual como parte de encontrarnos nuestro huerto lleno de flores y frutos rebosantes en nuestros árboles. Según el tipo de huerto y el espacio del que dispongamos podremos plantar una u otra especie, pero éstas son las que no nos deben faltar:
- Todo depende de las frutas que nos gusten, pero también de las condiciones de nuestro huerto. Los naranjos es una variedad que no debe faltar, pero debemos plantar otras especies que hagan la función de polinización.
- Podremos beneficiarnos con nuestros vecinos de los árboles que tengan en su finca para ayudarnos en la propia polinización de nuestros ejemplares. Esto permitirá que las abejas lleven el polen de unos a otros, lo que permite un beneficio muto.
- Cuantas más variedades de árboles frutales podamos plantar será mejor, podemos clasificarlas por la maduración de los frutos. Así podremos hacernos con especies que den fruta de temporada, y otros que den fruta principal y que se pueda almacenar bien.
- Hay que tener en cuenta las características del entorno donde está situado nuestro huerto ya que, algunas variedades de fruta son muy delicadas y sensibles a según qué condiciones climáticas.
- Para disponer los frutales y evitarnos problemas, podremos colocarlos de la siguiente manera: los árboles más altos en la parte norte y los más bajos al sur, para así compensar los momentos de sol y sombra en el día.