Todo depende del tipo de espacio que contemos para nuestro gallinero. Dependiendo de si tienes a tus gallinas en un jardín o un patio, éstas necesitarán un nivel de protección distinto. Algunos alojamientos disponen de una zona adyacente, un cercado, para que las aves puedan estar en libertad pero protegidas. Si este no es tu caso, te damos algunas pistas para mantener a tus gallinas en un lugar resguardado.
Lo más conveniente para nuestras gallinas, si es que disponemos de sitio, es que dispongan de un lugar para que paseen y se muevan con libertad. Algunos gallineros disponen de una zona adyacente que consiste en un cercado, esta zona es completamente segura, y podemos dejar solas a nuestras gallinas sin preocuparnos por vigilarlas. Recuerda, que si dispones de este tipo de gallineros, deben tener más de un metro cuadrado por gallina.
Otra alternativa a este tipo de cercados para que las gallinas hagan un poco de ejercicio, consiste en hacer un apartado en una zona del jardín que se encuentra alrededor de su alojamiento. Si decides construir uno de estos emplazamientos, asegúrate de que sea seguro. Recuerda que los zorros pueden trepar, así que coloca un techo. El césped perderá densidad si tienes siempre a las aves en un mismo sitio, de modo que una buena alternativa consiste en usar virutas de madera. Un cercado pequeño puede trasladarse de un lugar a otro, de modo que podrás mantener siempre el césped fresco y libre de enfermedades, mientras que las virutas de madera pueden retirarse, sencillamente, con un rastrillo, para luego colocar una capa nueva más o menos cada mes.
Tienes un ejemplo de este tipo de gallineros móviles o transportables en nuestra Web.