Una vez que la hembra ha sido fecundada, comienza la cuenta atrás en el proceso de gestación de nuestras crías de conejos. El período de embarazo tiene una duración aproximada de un mes, a partir del cual, el parto podrá adelantarse o retrasarse por dos días. Estas son algunas de las claves de la gestación y parto de nuestros conejos.
Para que el parto se desarrolle de manera adecuada y no tengamos alteracones físicas o psicológicas en las nuevas crías, debemos tener una constante observación en nuestros conejos. Durante todo este periodo debemos ofrecerle a la hembra unos cuidados especiales, como una correcta limpieza y desinfección de la jaula. Incluso, por comodidad del animal, tendremos que mantener un buen control de la iluminación, humedad y temperatura.
La hembra empezará a preparar el nido cuando falten unos cuatro días para el parto. Será momento para ofrecerle un lugar limpio, desinfectado y seco y con material suficiente para la hembra pueda construir su nido. Para evitar posibles enfermedades, lo mejor es rociar sobre el nidal una fina y delicada capa de insecticidas y acaricidas. Así evitaremos la aparición e parásitos.
La hembra empezará a dar muestras de inquietud, señal de que el parto estará muy próximo. El parto suele tener lugar durante la noche, y tiene una duración de una hora. La coneja estará pasiva, el tronco arqueado y las extremidades posteriores separadas y flexionadas. Debemos mantenernos siempre vigilantes durante todo el proceso, para evitar que las crías caigan al suelo.
Una vez finalizado el parto, tendremos que limpiar bien la jaula y retiraremos los posibles focos de infección. Las crías pasarán a estar con la hembra durante todo el periodo de lactancia que suele durar unos 40 días.