Tener un gallinero en casa es algo cada vez más habitual en muchos hogares debido a que los huevos son naturales, sin aditivos, más sabrosos y saludables.
Si tenemos un gallinero en casa debemos tenerlo en perfectas condiciones para garantizar el bienestar de nuestras gallinas para una buena producción de huevos. Para ello deberemos realizar tareas regulares de limpieza y desinfección del gallinero.
Para poder empezar la limpieza del gallinero éste debe estar vacío, por eso previamente deberemos trasladar a las gallinas a otro sitio, y quitaremos también los bebederos y los comederos para poder trabajar tranquilamente.
Lo primero que haremos será retirar las camas de las gallinas, el cual será un perfecto abono natural para nuestro huerto.
Seguidamente limpiaremos con agua y jabón todo el gallinero para después aplicar el desinfectante. Es recomendable que el jabón contenga algún componente antiparasitario, ya que las gallinas están expuestas a los ácaros, piojos, garrapatas, pulgas, etc.
Seguidamente ya se podrá aplicar el desinfectante. La mejor forma de hacerlo es con una mochila de fumigación. Para ello deberemos vestir adecuadamente: mascarilla, guantes, botas de goma, protector para la cabeza, e incluso un mono.
Cuando el gallinero esté limpio y desinfectado limpiaremos todos los accesorios (ponederos, bebederos, comederos, perchas…). Normalmente se hace con agua caliente y un poco de lejía.
Cuando hayamos acabado con la limpieza del gallinero y todos los accesorios también haremos un repaso por los alrededores.
Una limpieza a fondo del gallinero como la explicada en este artículo se deberá hacer 2 ó 3 veces en verano y 1 ó 2 en invierno. Los accesorios deberán limpiarse 2 ó 3 veces a la semana.