Tener nuestro propio gallinero casero es muy sencillo y fácil. Mantener un gallinero no conlleva tareas muy complicadas, las podemos realizar de manera cómoda diariamente y pueden colaborar con nosotros incluso los más pequeños de la casa.
Estas son las 7 tareas imprescindibles en la limpieza y cuidados de nuestro gallinero:
- Recoger los huevos puestos por nuestras gallinas. Dependiendo de la época del año, podremos recogerlos hasta de dos a tres veces al día. Luego hay que proceder a seleccionarlos y desechar aquello que no sean de calidad.
- Antes de reponer los bebederos con agua fresca y los comederos con alimentos especial para ellas, debemos limpiarlos bien evitando que haya suciedades propias de nuestras gallinas. Semanalmente también tendremos que desinfectarlos.
- Revisar el estado general del gallinero: que los bebederos y comederos funcionen correctamente y que la estructura esté en perfectas condiciones.
- Limpiar la cama de nuestras gallinas, el serrín o la paja, y remplazarla por una nueva en caso de que tenga mucha suciedad o humedad.
- Revisar el aspecto de nuestras gallinas. En cuanto notemos algo extraño en su comportamiento o en el aspecto de su plumaje, debemos separarlas del resto para evitar que se enfermen y así averiguar qué es exactamente lo que le ocurre.
- Las gallinas que no son productivas o que no ponen huevos, debemos separarlas del resto para que las demás no adquieran el mismo comportamiento. Luego ir introduciéndola de nuevo poco a poco.
- Llevar un control de cada gallina: lo que producen, comen, las que enferman,… nos ayudará a estudiarlas y tenerlas en mejores condiciones.